El vicepresidente de Asuntos Corporativos de Cerro Matoso S.A. (CMSA), Luis Marulanda, afirma que no obstante la sentencia proferida por la Corte Constitucional, la empresa avanza con todos los proyectos de inversión social que se acordaron con las comunidades y que han mejorado la calidad de vida de centenares de familias en el Alto San Jorge (Córdoba).
“El diálogo social de Cerro Matoso con las comunidades, iniciado en 2013, ha dejado inversiones por 17 mil millones de pesos. Este hito es una demostración clara de que sí es posible la convivencia entre la industria minera y las comunidades”, explica el señor Marulanda.
Y agrega, “la prioridad es cumplir con las órdenes del Alto Tribunal. A Cerro Matoso le gustan las consultas previas, somos amigos de esa herramienta que nos acerca más a las comunidades y nos sentimos cómodos en esos procesos. Es una oportunidad constante para profundizar el diálogo y conocernos mejor”.
Calidad de vida
La construcción de viviendas es una ejecución que les ha cambiado la vida a decenas de familias que ahora viven en cómodas casas. Con recursos de inversión social de Cerro Matoso se realizaron 252 mejoramientos, 63 adicionales gestionados por la empresa y ejecutados por el DPS, para un total de 315. Adicionalmente, hay otros 128 programados para realizarse de aquí a junio 30 de 2019, con lo que las reconstrucciones ascenderían a 480.
“Vivimos por más de 18 años en una casita muy pobre con piso de tierra y ahora con el apoyo total de Cerro Matoso tenemos una vivienda digna”, narra Miladis Peña, de Centro América.
La compañía ha construido o mejorado el 25 por ciento del total de las viviendas de estas comunidades indígenas, afro y campesinas aledañas a su operación, que sumado a las realizadas junto con el DPS sería de aproximadamente un 31 por ciento.
Ómar Suárez, de 27 años, de la Vereda de Puente Uré y descendiente indígena Zenú, es Tecnólogo en Mantenimiento Mecánico Industrial del SENA y trabaja desde hace diez meses en Cerro Matoso. “Este es mi sueño cumplido. Estoy muy agradecido. Mi familia fue beneficiada con el mejoramiento de vivienda, estamos muy cómodos. La empresa nos ha colaborado mucho”.
Para Nafer Rangel, Gobernador Local del Cabildo Indígena Zenú Boca de Uré y quien estudia Derecho a través de una beca otorgada por Cerro Matoso, “la comunidad está muy complacida con este proyecto. En total son 23 familias beneficiadas. Cerro Matoso pone el recurso económico y ellos, la mano de obra. Es un ejercicio de entendimiento que queda como ejemplo para otras comunidades”.
Además de reconstruir la infraestructura de las siete instalaciones educativas de las veredas, mediante la edificación de nuevas aulas, Cerro Matoso ha eliminado el hacinamiento estudiantil y forjado la calidad de la educación mediante el fortalecimiento de las capacidades de los educadores, garantizando los estándares nacionales en estos aspectos. Igualmente, se han ejecutado proyectos de suministro de agua potable para todas las comunidades.
Líderes jóvenes
Cerro Matoso estableció hace cinco años el Programa de Becas de educación superior para los jóvenes de las comunidades vecinas. A la fecha son 74 estudiantes, miembros de las comunidades del área de influencia de la operación niquelera, que lograron ingresar a la universidad.
“El Programa de Becas es uno de los proyectos más emotivos que tenemos porque los adolescentes no tienen ninguna oportunidad de hacerse profesionales. Estamos formando a los líderes que sacarán adelante esta región en los próximos años”, explica el vicepresidente, Luis Marulanda.
La historia de Tatiana Taborda Tuirán, hoy practicante en Cerro Matoso en el área de Comunicaciones, es ejemplar. Ella es de Boca de Uré, Consejo Comunitario de Comunidades Negras, fue de las primeras beneficiadas. Llegó a estudiar a Medellín (nunca había estado allí), su vida de niña y de joven fue en el campo y en Planeta Rica.
“Estoy feliz de hacer las pasantías profesionales en la empresa que ha invertido en mí. Lo hago como un agradecimiento, además porque sigo aprendiendo. En mi familia siempre decimos que esto no hubiera sido posible sin el programa de Cerro Matoso”, narra la joven comunicadora.
Aprender emprendiendo
Otro gran proyecto de Cerro Matoso es el fortalecimiento a las juntas de acción comunal. Se ha generado un empoderamiento para estos grupos organizados en cuanto a su institucionalidad y articulación para apoyar a sus comunidades.
La líder Edilsa Pitalua Arias, de la vereda La Odisea, municipio de Puerto Libertador dice: “es evidente que Cerro Matoso y las comunidades avanzan en un proceso de alianzas que ha beneficiado notablemente a la región”.
La presidenta de la Junta de Acción Comunal del Corregimiento Centro América, municipio de Puerto Libertador, Mónica Oyola, explica que con las juntas de acción comunal de la zona de influencia hay un diálogo asertivo y se toman decisiones consensuadas. “Una cosa es lo que pueda decir una sentencia y otra, cómo nos vemos en la comunidad, cómo se ha crecido”.
Para el docente Miguel Leyva, de la IE José María Córdoba, de Centro América, “el fortalecimiento cultural es un gran acierto de Cerro Matoso. Nos han dado instructores, instrumentos, logística para viajes y sobre todo, confianza”
Los niños y jóvenes aprenden de música, danza y directamente de su pasado ancestral. Estefanía Flórez, de grado 6º y de origen indígena asegura que: “todos estamos muy agradecidos con el fortalecimiento cultural que pretende mostrar afuera cómo es nuestro entorno”.